Mantenciones

Conocer tu vivienda es fundamental, así como adquirir conocimientos para entender su funcionamiento. Para garantizar la prolongación de la vida útil de las edificaciones, se requiere de una preocupación constante, mediante la aplicación de un conjunto de medidas preventivas de mantención, reposición y reparación.

• Preventiva:
  Detectar y prevenir oportunamente posibles fallas, solucionando los problemas antes de que se originen. Se realiza planificadamente en el tiempo, de acuerdo con las recomendaciones de profesionales.
• Correctiva:
  Resolución de problemas en desarrollo que afectan la calidad de vida o seguridad de residentes. Se realiza cuando las maquinarias, instalaciones o equipos presentan fallas visibles y repentinas.
• De rutina:
  Chequear que todo esté en orden, se desarrolla habitualmente, y es de fácil solución.

Revisa más detalles de forma didáctica en la guía sobre cómo mantener una casa o un departamento realizada por la Cámara Chilena de la Construcción en el Manual de Uso y Mantención de la Vivienda.

https://www.cchc.cl/centro-de-informacion/publicaciones/publicaciones-

manuales-tecnicos/manual-de-uso-y-mantencion-de-la-vivienda-41

Este documento contiene un amplio conjunto de recomendaciones de uso y mantención, debiendo el propietario seleccionar y tener en cuenta aquellas que corresponden a su caso, de acuerdo con las especificaciones técnicas de venta.

¡Importante! Recuerda informarte sobre la responsabilidad del primer vendedor por fallas o defectos de construcción, la que puedes revisar en el capítulo 4.

Puedes vivir en un condominio de casas o en copropiedad de departamentos. Ambos se rigen por la Ley de Copropiedad Inmobiliaria. Para que tengas una idea, casi el 24% de las viviendas en Chile están en régimen de copropiedad, lo que obliga a quienes viven en comunidades de casas o departamentos a conocer, respetar y cumplir un reglamento de copropiedad, que cada organización de propietarios adapta según sus intereses y criterios.

En este contexto, te detallamos información relevante que debes conocer:

• Ley de Copropiedad.
  Acogerse a ella y su respectivo Reglamento de Copropiedad es voluntario. Sin embargo, la tendencia es que las inmobiliarias lo incorporen a la gestión de la copropiedad.
• Reglamento interno.
  El Reglamento de Copropiedad es complejo y largo. Entonces la inmobiliaria genera un reglamento interno propio y adaptado, que debes tener y comprender.
  
• Espacios comunes.
  
Como copropietario, eres responsable de calderas, escaleras, quinchos, piscinas, áreas verdes, etc. Si se daña una alcantarilla, y siempre que el daño no obedezca a una mala ejecución de la obra, comunícalo para que sea reparada.
• Gastos comunes y prorrateo.
  
Los gastos de la copropiedad se llaman gastos comunes, los que están asociados a pago de administración, aporte al fondo de reserva, mantención de los espacios comunes, etc. Los gastos comunes se prorratean, es decir, se distribuyen de acuerdo con la superficie que tenga cada copropietario. 
Importante: a aquellos propietarios que se atrasen dos, tres o más cuotas se les suele cortar la energía eléctrica.
• Fondo de reserva.
  
Del pago de los gastos comunes se guardará un porcentaje que se destinará al fondo de reserva para cubrir asuntos urgentes o costosos.

Servicio de postventa: un factor

El servicio de postventa comienza cuando te entregan las llaves de tu vivienda nueva. La postventa es una preocupación importante de las inmobiliarias.

• Responsable
  Tu contraparte será la empresa inmobiliaria o sus representantes (por ejemplo, una empresa especialista en servicios de postventa). Ellos atenderán tus requerimientos en la medida que los desperfectos estén dentro de la responsabilidad legal del primer vendedor por fallas o defectos de construcción.
  
• Espacios comunes.
  
En este punto cualquier requerimiento debe ser dirigido al Comité de Administración, que está facultado para discutir arreglos y correcciones con la inmobiliaria.

Abanico de seguros para su vivienda

Con el crédito hipotecario contratas dos seguros obligatorios: Desgravamen e Incendio. El primero que cubre el saldo de la deuda al momento del fallecimiento del deudor. El segundo, de incendio, generalmente cubre sólo el saldo de la deuda si el bien raíz se siniestra.

También puedes contratar otros seguros recomendados, no obligatorios, que se incorporan de forma adicional a tu crédito hipotecario, o si prefieres, con otra entidad financiera como por ejemplo una compañía de seguros.

Recuerda leer bien las pólizas, requisitos y coberturas de estos seguros, e infórmate sobre los pasos que debes seguir para denunciar el siniestro a la entidad, en caso de ser necesario hacer efectivo el seguro.

Alguno de ellos son:

• Sismo:
  Sismo o incendio causado por sismo.
• Motores:
  Daños por impacto de autos, camiones, motos, aviones.
• Conductos de agua:
  Daños por rotura de cañerías o estanques matrices.
• Naturaleza:
  Daños por fenómenos de la naturaleza.
• Conmoción pública:
  Daños derivados de desórdenes populares o terroristas.
• Inhabitabilidad:
  Compensación por inhabitabilidad de la vivienda y honorarios profesionales para quienes la reparen.
• Mal uso o desperfecto:
  Daños propios o a terceros por desperfectos o mal uso de los sistemas y artefactos.